Estudio de materialidad: aspectos críticos para la elaborar informes de sostenibilidad
La sostenibilidad corporativa ya no es voluntaria, sino que responde a exigencias normativas, demandas del mercado y expectativas sociales. En este contexto, el estudio de materialidad se consolida como una herramienta esencial para identificar los aspectos ESG realmente estratégicos para las organizaciones.
La elaboración de información corporativa requiere sistemas rigurosos y fiables para determinar qué aspectos se deben reportar y priorizar. No basta con informar sobre datos genéricos o poco relevantes, es fundamental profundizar.
El estudio de materialidad contribuye a garantizar la transparencia, reforzar la toma de decisiones y alinear los objetivos de sostenibilidad con la estrategia del negocio. Además, permite cumplir con marcos regulatorios como la Directiva CSRD y los estándares ESRS de la Unión Europea.
La digitalización adquiere también un papel protagonista: gracias a herramientas tecnológicas, este proceso se vuelve más eficiente, trazable y conectado a la toma de decisiones basada en datos.
¿Qué es el estudio de materialidad y por qué es clave en la sostenibilidad corporativa?
El estudio de materialidad es un proceso estructurado que permite a las organizaciones identificar, analizar y priorizar los aspectos ESG que generan impactos significativos en su desempeño económico, social o ambiental, o que reflejan su impacto en el entorno, conforme al enfoque de doble materialidad.
Incluir la materialidad en los informes de sostenibilidad permite centrar los esfuerzos en cuestiones realmente relevantes. Garantiza que la información divulgada es práctica, útil y, sobre todo, transparente. Además, permite focalizar esfuerzos, optimizar recursos, mitigar riesgos y responder a las expectativas de partes interesadas, inversores y reguladores.
Para las organizaciones, obligadas o no a presentar informes de sostenibilidad, los beneficios de un estudio de materialidad robusto son numerosos:
- Informes focalizados y eficientes, centrados en cuestiones de interés fundamental.
- Gestión proactiva del riesgo mediante la identificación temprana de amenazas ESG.
- Refuerzo de la legitimidad, al dar respuesta clara a los temas que preocupan a las partes interesadas.
- Integración estratégica, conectando la sostenibilidad con los objetivos de negocio.
- Cumplimiento normativo, garantizando la adecuación a los marcos regulatorios más exigentes.
¿Qué constituye un aspecto material?
Un aspecto material es cualquier factor ambiental, social o de gobernanza que pueda influir de forma significativa en la continuidad operativa, la rentabilidad, la reputación y el impacto social y ambiental de la organización. Va más allá de lo económico y abarca desde emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) hasta derechos humanos en la cadena de suministro, integridad corporativa o diversidad.
Su relevancia es estratégica, puesto que asegura que los esfuerzos de sostenibilidad se centren en lo esencial. Refuerza la relevancia y acción de los informes ESG, fortalece la resiliencia corporativa y genera confianza de las partes interesadas al demostrar responsabilidad real.
Etapas clave en el estudio de materialidad
Abordar un estudio de materialidad no es una tarea menor. Requiere estructura, un enfoque adecuado y, cada vez más, soluciones digitales que permitan recoger, analizar y visualizar datos con precisión. En ese proceso hay fases de especial relevancia:
1. Evaluación de materialidad
Las evaluaciones de materialidad son procesos formales por los que la organización determina sus aspectos ESG más importantes. Para ello es imprescindible establecer el alcance de la organización e identificar objetivos claros: ¿Qué quiere lograr la empresa con estudio de materialidad? ¿Qué áreas de negocio están implicadas? ¿Qué grupos de interés deben participar?
2. Involucrar a las partes interesadas
Las partes interesadas son fundamentales para determinar los aspectos es un estudio de materialidad. A través de herramientas como encuestas, entrevistas o grupos focales se obtiene información cualitativa y cuantitativa clave que permite que los informes de sostenibilidad reflejen las cuestiones esenciales.
Es crucial, por ello, identificar claramente a todas las partes interesadas y establecer una comunicación clara, transparente y bidireccional. También es de gran relevancia gestionar tensiones a través del diálogo y la participación.
3. Evaluar riesgos y oportunidades
Una evaluación de riesgos identifica amenazas normativas, ambientales o sociales. El objetivo es adelantarse a posibles eventualidades, diseñar estrategias proactivas de prevención y mejorar la resiliencia de la organización. También es necesario identificar oportunidades relevantes, evaluando su impacto potencial sobre operaciones, reputación social corporativa y resultados financieros.
La correcta recopilación de datos internos, externos, cualitativos y cuantitativos es una cuestión determinante. El uso de soluciones digitales permite sistematizar esta información, detectar patrones y preparar informes automatizados.
4. Alineación estratégica corporativa
Identificar correctamente los aspectos esenciales en un estudio de materialidad permite que estos se alineen con la estrategia corporativa y sea posible alcanzar los objetivos de sostenibilidad de la organización. Los temas materiales se priorizan estableciendo KPIs e integrándolos en la planificación.
5. Crear una matriz
La matriz de materialidad es el resultado gráfico del proceso. Representa, de forma clara, qué temas se deben considerar como prioritarios en la estrategia ESG y en el informe de sostenibilidad.
Este tipo de documentos representan en un eje la relevancia del aspecto y en el otro su impacto para el negocio. Cada asunto, por otra parte, recibe un valor, según los datos recogidos. Con todo ello se genera un gráfico que facilita la lectura de la información recogida y priorización de los temas.
Por otra parte, es necesario que la matriz se revise con frecuencia para que queden reflejados aquellos cambios internos o en el entorno de la organización que puedan afectarla de forma significativa.
La digitalización: motor del estudio de materialidad
La complejidad y la frecuencia de actualizaciones normativas hacen del estudio de materialidad un reto para la gestión ESG. Aquí es donde un software para la gestión de la sostenibilidad se convierte en aliado imprescindible gracias a funcionalidades clave:
- Automatización de encuestas y recolección de datos: ahorro de tiempo y precisión.
- Análisis predictivo: son herramientas capaces de procesar grandes volúmenes de datos, identificando tendencias y patrones.
- Paneles interactivos: permiten visualizar la matriz de materialidad en tiempo real, por área o tema.
- Alertas normativas: facilitan mantenerse al día con CSRD, ESRS, GRI u otros marcos.
Este enfoque tecnológico mejora la eficiencia y fiabilidad los estudios de materialidad. El resultado son informes de sostenibilidad más sólidos y organizaciones que se posicionan como actores resilientes, transparentes y responsables.
Plataforma Tecnológica ESG
El estudio de materialidad es el corazón de cualquier informe de sostenibilidad. Si está bien diseñado, proporciona claridad, foco estratégico y valor real. La Plataforma Tecnológica ESG facilita el proceso: reduce tiempos de recopilación y análisis de información, mejora la calidad del estudio mediante detección automatizada de temas críticos, facilita la gobernanza y mejora la transparencia, entre otras ventajas.
Es una herramienta tecnológica diseñada para optimizar la gestión ESG de las organizaciones. Su configuración modular le dota de flexibilidad para poder componer soluciones personalizadas y escalables. Si quieres conocer más a fondo sus ventajas, solicita más información a nuestros consultores.
